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29-01-2009 |
DE EMERGENCIA A DESASTRE |
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El informe técnico que se elaboró para pedir la emergencia habla de pérdidas cuantiosas por la sequía. |
El pedido de emergencia agropecuaria que fue enviado al Ministerio de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires habla de pérdidas, hasta la semana pasada, de entre 130 y 140 millones de pesos por la falta de lluvias. Los entendidos señalan que el cálculo final oscilaría entre los 180 y 220 millones de pesos.
El análisis lo hizo el ingeniero Agrónomo, Mauricio Bottaro, de la firma Rivara S.A., con la intervención de representantes de la Cámara de Comercio y de Productores Rurales. La documentación ya fue enviada por mail a La Plata y en el transcurso de esta semana se entregarán los originales en la dependencia del gobierno bonaerense.
En la evaluación técnica se menciona que estarían afectadas entre el 50 y el 80 por ciento de las parcelas sembradas, lo que configura la emergencia agropecuaria. Pero en el informe se expresa que de no mediar precipitaciones la situación se tornaría más crítica y ya se pasaría a la calificación de desastre agropecuario.
En la documentación que se envió a La Plata se señala que si se compara el año 2008 con el anterior hay una deficiencia de lluvias que ronda los 488 milímetros y si se toman los meses de enero de 2008 y 2009 hay una diferencia de 182 milímetros.
En Productores Rurales mencionan que en unas 40 o 50 parcelas del partido los propietarios han decidido picar el maíz y darle de comer a los animales que con la sequía no tienen pastos para alimentarse. También señalan en la entidad que en los tambos la producción diaria por animal han caído sensiblemente: una vaca que producía entre 30 y 35 litros de leche por día ahora está en el orden de los 12 litros.
El pedido de Emergencia Agropecuaria que hizo la Comisión Local de Emergencia y Desastre Agropecuario es el mismo que elevaron los partidos de Bragado y Chivilcoy. La solicitud permitiría postergar los vencimientos de los impuestos provinciales por la sequía que afecta a la zona productiva del partido.
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