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| 17-11-2008 |
| LA JABALINA: EL DEPORTE ALBERTINO |
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El lanzamiento de la jabalina es el deporte individual que más logros cosechó en los diecisiete años de los Torneos o Juegos Bonaerenses. |
El caso más reciente y más resonante es el de Mauro Fernández que en quince días se transformó en el campeón nacional y provincial de lanzamiento de la jabalina. Fue medalla de oro en los Juegos Nacionales Evita y fue el mejor en los Juegos Deportivos Buenos Aires.
En esta edición también hubo otra medalla que se consiguió en esta disciplina, Yésica Alvarez ganó la de bronce en su categoría. La deportista ya tenía en su haber dos preseas de oro y de plata en ediciones anteriores de los Torneos Juveniles Bonaerenses.
Si nos remontamos tan sólo un año lo encontramos a Rodrigo Sosa siendo medalla de oro en los Torneos y subcampeón nacional en los Juegos Evita. En esa última edición cuando todavía se llamaban torneos Daniel Corona también se subió al podio en la misma disciplina.
Al retroceder aún más, corriendo el riesgo de omitir algún nombre, nos encontramos con los logros de Sebastián Sabelli, Yanina Belusci, Ramón Alvarez y Rolando Dilego. Todos ellos, y algún otro atleta que seguramente pasamos por alto, fueron ganadores de medallas en los Torneos Bonaerenses con marcas calificadas en la prueba provincial.
Lo que nos lleva a aseverar que la disciplina lanzamiento de la jabalina es el deporte individual que mejores resultados a través de los años le ha dado a las delegaciones de Alberti.
El entrenador Darío Torres, cuando fue consultado sobre los logros en la jabalina, explicó: “Me parece que el lanzamiento de la jabalina se hizo algo cultural en Alberti, los chicos que vienen no dicen queremos hacer atletismo, eligen la jabalina. Se transmite también de los más grandes a los que recién empiezan”.
Torres hizo esa apreciación puntualizando el comienzo y la continuidad de una práctica deportiva en edad escolar. El gran desafío que se plantea, respaldado en la historia y a la luz de lo que ocurrió en los últimos Juegos, sería impulsar esta práctica al terreno del profesionalismo para poner a prueba a estos chicos que consiguieron esas marcas. Hablar de alto rendimiento implica no sólo contar con la aptitud del deportista, también se necesitan otros elementos que son clave en su formación y crecimiento como el apoyo económico y técnico.
El salto al profesionalismo es un gran paso que merece ser evaluado, sobre todo si se tiene presente que por los resultados obtenidos el lanzamiento de la jabalina es el deporte individual albertino.
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