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02-11-2008 |
FUE DERROTA EN LA PRIMERA SEMIFINAL |
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San Lorenzo cayó 2 a 1 de local mostrando desconcierto y una producción colectiva e individual por debajo de la que venía exhibiendo en el torneo. |
En los dos primeros partidos de octavos y cuartos de final los empates que consiguió San Lorenzo ante Origone e Independiente dejaron la sensación de que había posibilidades de dar el gran golpe de visitante y lo consiguió, en la derrota que sufrió ante Villa Belgrano por 2 a 1 como local quedó la impresión de que va a ser más difícil torcer el destino. Porque más allá del resultado, lo que se vio en el estadio Juan Manuel Sasso fue un equipo local superado en gran parte del desarrollo de los noventa minutos.
En las primeras acciones de los dos tiempos se vio la mejor versión de Villa Belgrano y lo más pobre de lo que va del torneo de San Lorenzo. La diferencia no sólo fue producto del juego del visitante, hubo un alto porcentaje de ingerencia en la cantidad de errores que cometió el conjunto dirigido por Roberto Coronel.
A los seis minutos de la primera parte Villa Belgrano encontró el gol producto de un desacierto de Sergio Bibini. El arquero intentó salir jugando y la pelota terminó en los pies del delantero Germán Milla que con un disparo alto que pegó en travesaño marcó el gol para el conjunto visitante.
Después del primer tanto se sucedieron varias jugadas de peligro para Villa Belgrano, mientras San Lorenzo se mostraba desconcertado y sin rumbo. Ya no sólo en el funcionamiento colectivo, también algunos desempeños individuales estuvieron por debajo del nivel que venían mostrando en el torneo.
Villa Belgrano desperdició todas las ocasiones que tuvo, y a medida que pasaron los minutos San Lorenzo consiguió algo de orden y comenzó a escalonarse mejor en la cancha. Fue así que sobre el final del primer tiempo una jugada individual de Agustín Manganiello le permitió al local alcanzar la igualdad. En determinadas acciones se le puede achacar a Manganiello que tiene tendencia a la jugada individual, pero por lo que mostró el equipo en todo el partido la habilidad del número 10 fue la única fortaleza que pudo esgrimir el conjunto albertino ante la ausencia del funcionamiento colectivo.
Como ocurrió en el comienzo del partido, el inicio de la segunda mitad también fue fatal para el equipo local. Otra distracción, en este caso de Ramón Alvarez, le permitió a Ezequiel Cariaca convertir el segundo gol y darle la ventaja definitiva a Villa Belgrano.
El conjunto visitante tuvo otras chances que desperdició y que le hubiesen posibilitado afrontar el encuentro definitivo de la serie con otro panorama.
Por el pobre desempeño colectivo, por la floja producción individual, la desventaja de un gol no es una catástrofe para San Lorenzo. El equipo albertino tiene margen para soñar en dar vuelta la serie de visitante si su juego da un vuelco, pero el panorama se presenta mucho más desfavorable que las dos instancias anteriores y no sólo por el resultado.
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