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07-09-2008
DE ALBERTI NO SE SABE NADA
Una noticia que se conoció hace dos días en Chivilcoy vuelve a poner en el centro de la escena la problemática del agua que se consume: de red o de pozo.
En la edición del viernes último de los diarios de la ciudad de Chivilcoy se conocieron declaraciones de la secretaría de Calidad Alimentaria, Zoonosis y Medio Ambiente que tuvieron un gran impacto. La ingeniera Mónica Aré señaló que: “En algunas zonas de Chivilcoy los valores de arsénico en el agua corriente están en el límite de lo permitido y en otras, por debajo”. Las declaraciones de la ingeniera se completan con otra revelación: “hubo muestras de agua de pozo en la zona de quintas que dieron muy por encima de lo establecido por la legislación vigente”.

La situación de la ciudad de Chivilcoy sumada a lo que se viene escuchando de otros lugares del noroeste de la provincia de Buenos Aires generan cierta inquietud en Alberti respecto del agua que se consume, ya que no se conocen resultados de los últimos análisis oficiales que revelen lo que están tomando los vecinos.

En la última sesión del Concejo Deliberante la oposición presentó un pedido de informes en el que le solicitaba al Poder Ejecutivo que responda cuáles son los motivos por los cuales no se cumple con la ordenanza que establece la publicación de los resultados de los análisis de agua en las facturas de las tasas Municipales. Los análisis oficiales se conocieron en cada oportunidad que desde la oposición se impulsaban cuestionamientos respecto del servicio de agua corriente, pero hay que remontarse varios meses atrás para encontrarse con esa información

La preocupación no sólo debe orientarse a lo que ocurre con el agua corriente, también debe significar un aspecto a considerar lo que está sucediendo en algunos lugares del partido donde se sigue consumiendo agua de perforaciones propias sin que medie ningún tipo de análisis de lo que se bebe.

La situación de la zona del noroeste de la provincia de Buenos Aires es grave con la contaminación que tiene el Río Salado. Los análisis revelan que el curso de agua está afectado por lo que arrojan algunas ciudades, entre ellas Alberti, que no tratan los efluentes cloacales. Hace algunas semanas se conocía la información de que la alta concentración de escherichia coli en las aguas de un río que no tiene escaso caudal superaba los índices históricos.

Estas condiciones de contaminación, lo que ocurre con Chivilcoy, Carlos Casares, la situación del Río Salado, deben representar elementos que lleven al gobierno a divulgar los análisis del agua que se consume en Alberti para tranquilidad de los vecinos y tomando como referencia que se ha dicho en más de una oportunidad que la conexión es directa desde los pozos a la red, sin mediar el paso por el tanque.
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