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10-09-2010
REHENES DE UN PALO
Hace unos 30 días que un poste de la empresa de telefonía se quebró y fue apuntalado por los Bomberos. El palo está en la puerta de la casa de una familia que debe esquivarlo para salir o entrar.
Una familia sigue siendo rehén de la falta de respuesta de la empresa de telefonía que todavía no cambió el palo que se quebró y que fue apuntalado de manera provisoria. Para salir o entrar de la casa deben esquivar el palo que flanquea el acceso.

Desde hace unos 30 días la familia cuya casa está ubicada en la calle Laprida, entre Azcuénaga y Eva Perón, está viviendo con el peligro latente que significa tener un palo de la empresa proveedora de telefonía a punto de caerse.

La casa de este matrimonio que tiene 3 hijos menores está amenazada por ese palo que se cayó producto de un fuerte viento y que debió ser apuntalado por los Bomberos Voluntarios ante el llamado de los vecinos.

Hubo avisos pidiendo que vengan a recomponer la situación y hasta el momento el palo sigue como lo dejaron los Bomberos, apuntalado con otros 2 palos y siendo un peligro no sólo para quienes habitan esa vivienda sino para todos los que circulan o viven por esa zona.

Los Bomberos colocaron una cinta de peligro tratando cercar la zona como una solución provisoria. A 4 semanas de la caída del palo y después de que fuera apuntalado, todo sigue igual. La respuesta de la empresa fue que el cambio del palo podría llegar a demorarse hasta 90 días.


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