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03-05-2011 |
VISITA DE DOMINGUEZ AL CRIADERO |
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El Ministro estuvo en en la empresa de la familia Klein por el aniversario. |
El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Julián Domínguez, visitó el Criadero Klein, la empresa familiar dedicada a la genética de trigo, que cumplió 92 años. “Queremos expresar nuestro reconocimiento al valor intelectual y técnico de esta familia que dedicó casi un siglo al mejoramiento del trigo en sus diversifcaciones, tanto genéticas como en sus tipos de calidad, que son ejemplo a nivel internacional”, manifestó Domínguez al reunirse con los directivos de la firma.
“Nuestro compromiso es apoyar al empresariado nacional para desarrollar productos con alto valor agregado y de excelente calidad. Los profesionales argentinos –sostuvo- tienen un gran potencial para realizar investigación aplicada a las necesidades concretas del sector productivo”, dijo Julián Domínguez quien estuvo acompañado por el Jefe de Gabinete del Ministerio, Miguel Recalde.
La empresa Klein data de 1919, época en la que el trigo se expandía en el país de la mano de los ferrocarriles. Su creador, el ingeniero agrónomo Enrique Klein, era un inmigrante alemán apasionado por la investigación y el mejoramiento de la calidad de trigo. Hoy la firma está en manos de su hijo Oscar Klein, que trabaja junto a un nutrido grupo de profesionales agrónomos.
La empresa comercializa actualmente semillas de 11 variedades de trigo, que ocupan cerca del 30 % del área sembrada con trigo en el país. También comercializa semillas en Uruguay y próximamente llegará a Paraguay.
Generar variedades de trigo es un ciclo que lleva unos 10 años, en donde se realiza el cruzamiento, la selección y posterior evaluación de los desarrollos. En los inicios, la familia Klein realizaba casi todo el proceso de manera manual. En el año 1988 comenzaron a ejecutar ensayos con siembra directa y hoy utilizan distintos métodos.
“La siembra manual genera mejores resultados, con más uniformidad de plantas, pero sabemos que para manejar un gran número de cruzamientos se necesitan más parcelas, y para eso es necesario mecanizar”, explicó Néstor Machado, del departamento técnico de Klein.
La etapa de selección es la más artesanal, donde los expertos escogen la mejor variedad entre muchas. “Es una práctica que no se aprende en la facultad, pese a que todo nuestro personal es calificado en el sector académico, los resultados se obtienen trabajando como en este día primero de mayo que nos acompaña por primera vez un Ministro de Agricultura”, dijo al respecto Oscar Klein, hijo de Enrique, hoy a cargo de la empresa.
En la etapa de evaluación, se hacen ensayos comparativos de rendimiento en diferentes zonas y ambientes. Cada genotipo se prueba en 12 ambientes diferentes por año, luego se pasa al análisis de calidad en laboratorios propios y también oficiales.
El Ministro de Agricultura se comprometió con la firma Klein a continuar y profundizar la investigación con las estaciones experimentales del INTA y los técnicos del estado nacional para monitorear por regiones la calidad y tipos de trigo. “Es un trabajo que seguramente con el Instituto de Semillas (INASE) y el INTA vamos a potenciar para que la investigación y la ciencia sigan construyendo un modelo nacional para la industria semillera”, reseñó Julián Domínguez
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