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09-09-2014
EL QUE PASÓ SE MOJÓ
Las pérdidas del tanque y el viento provocaron que quien pasó por la calle Belgrano fuese alcanzado por las gotas de agua.

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Que el tanque de agua pierde no es ninguna novedad. Desde hace muchos años, a pesar de los intentos que se hicieron por arreglarlo, esa mole de cemento cuando tiene determinada cantidad de agua comienza a verterla por las grietas.

Lo que sucedió esta mañana fue una combinación entre el agua que perdió y la orientación del viento, lo que hizo que esas gotas llegaran a la calle y la gente que pasaba por Belgrano, entre Azcuénaga y Hermana Zanotti, fuera alcanzada por esa lluvia.

Gotas de agua que tuvieron que esquivar aquellos que circularon en bicicleta o hicieron ese trayecto caminando. La gente se tuvo que subir a la vereda porque el agua llegaba hasta la calle, y por momentos ni la distancia de la vereda fue suficiente para evitar las gotas de agua. Ni hablar si algún desprevenido no se dio cuenta de la situación y pasó sin mirar.

El proyecto que se encuentra en ejecución de refuncionalización del sistema de provisión de agua corriente contempla entre sus etapas una nueva reparación del tanque de agua. Esa instancia llegaría una vez que se haga el acueducto para conectar los nuevos pozos y se extienda la red a la zona urbana.

Los intentos anteriores que se hicieron para reparar el tanque no dieron resultado, el último que se llevó adelante fue en diciembre de 2010. En aquel momento la obra que superó los 200 mil pesos contemplaba la reparación de las grietas, la aplicación de productos para el sellado y la pintura de la estructura. En 2005 hubo otro intento para solucionar el tema de las filtraciones que tuvo un corto plazo de durabilidad.
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