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| 13-02-2015 |
| CIERRE DEL SUPER FAMILY |
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Mañana cierra la puerta el supermercado porque se viene a instalar un nuevo súper chino que compró el fondo de comercio. Se pierden fuentes de trabajo porque los nuevos propietarios no emplean mano de obra local. |
El representante del Sindicato de Empleados de Comercio, Carlos Enriques, habló del cierre del Súper Family. El supermercado que después de 15 años dejará de trabajar mañana con una implicancia en la pérdida de fuentes de trabajo. “Todo comenzó con un trascendido, después nos reunimos con los empleados el día miércoles y ya es un hecho que el Súper Family fue vendido a un supermercado chino de la ciudad de Mercedes. Como los chinos lo compran sin personal, no encontramos frente al problema de unas 14 familias que quedan sin trabajo. Esa es la preocupación nuestra”.
“Lo que faltó fue notificar con antelación a los empleados, decirles que no se podía sostener el supermercado. Cuando se instala un negocio, si bien hay alguien que pone el capital, está el obrero que es el que hace eñ trabajo y es la cara visible ante la sociedad. Por eso me parece que debió existir más sinceridad, un agradecimiento hacia la gente de Alberti que le ha dado mucho al Súper Family. Y si en algún momento la gente se le retiró fue porque las cosas no andaban, por la diferencia de precios. Si bien el Family es un lugar hermoso, limpio, con productos de calidad, pero si los precios no dan, la gente cuida su economía”, sostuvo Enriques.
¿Qué implica que se instalen tantos supermercados chinos?
-Es preocupante porque los chinos no emplean mano de obra local. En Bragado hay cuatro y no tienen empleados. Lo que tienen ellos es que no les interesa la carnicería y la verdulería y la concesionan. Lo que habría que buscar a nivel nacional, provincial y local, si bien no se les puede cerrar la puerta porque el beneficio es para los consumidores, que tengan la obligación de tomar empleados locales. Pero las cosas están así y por el momento no se pueden cambiar.
¿Qué panorama hay hoy?
-El panorama es claro: se cierra una empresa y los empleados perciben lo que corresponde y no hay derecho a reclamar. Lo que pasa es que la mirada no puede ser tan sencilla, porque la gente va a cobrar un dinero que no le durará mucho tiempo y mientras tanto debe buscarse un lugar dónde trabajar siendo que los puestos de trabajo no abundan.
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