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| 14-11-2019 |
| "Son 100 años de la empresa y de la familia" |
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En el festejo por el centenario del Criadero Klein, Gustavo destacó de su abuelo el conocimiento, la perseverancia y el coraje. |
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En la fiesta de los cien años del Criadero Klein el principal orador fue el presidente de la empresa, el ingeniero agrónomo Gustavo Klein. Su discurso abarcó el pasado, el presente y planteó desafíos para el futuro.
En diálogo con este medio, Gustavo Klein dijo respecto del aniversario: “Haber llegado a los 100 años nos pone muy felices y orgullosos, porque es muy significativo darse vuelta y mirar para atrás y saber que fueron 100. Y de alguna manera, también representa la suerte de estar viviéndolo, esa es una bendición que uno tiene que agradecer. Estamos muy enfocados en un gran recuerdo del pasado, en nuestro orígenes, si bien nosotros ya somos la tercera generación de la familia y hace muchos años que trabajamos en el Criadero, los que nos precedieron nos dejaron muchas cosas hechas, nosotros las fuimos mejorando y supimos llegar hasta acá, y esperamos que los que continúan lleguen a los próximos 100. Es muy difícil condensar una explicación, son 100 años de la empresa y de la familia”.
En cada mes el noviembre el Criadero presenta nuevas variedades de semillas de trigo. La designación de cada una tiene que ver con la marca Klein y un nombre. ¿Qué nombre le pondría a las variedades para reflejar este momento del Criadero?
-Le pondría dos nombres, yo diría perseverancia y coraje. Son las dos virtudes, sumadas al conocimiento, que fueron las de mi abuelo Enrique.
¿Por qué coraje?
-Porque si vos te subís a un barco a los 23 años como lo hizo mi abuelo, dejando su país de origen, dejando todo, para venirse a estas tierras, primero a Uruguay y después a Argentina, y luego fundás un Criadero de Semillas en el medio de la nada, y vivís en un rancho de barro como lo hizo él, ya de por si escuchar eso te pone la piel de gallina. Y en un lugar que no conocía. Estaba en otra patria, con otras costumbres, con otros vaivenes y turbulencias, y así y todo pudo navegar y lograr lo que consiguió, me parece que puntualizar en estas cuestiones es el mejor homenaje que le podríamos hacer.
Utilizando un término de la actividad, también sobresale que el proyecto se hizo resistente a las adversidades a través de estos 100 años…
-Tuvimos vaivenes desde el punto de vista económico, político, y también discusiones internas porque somos una familia grande. Y estar de acuerdo entre todos nosotros implica un gran trabajo de comunicación, de tratar de estar siempre unidos. Hoy el Criadero tiene 55 socios y va a tener muchos más en pocos años. No es nada fácil, por eso la satisfacción no pasa por lo económico, a veces hay otras cosas. El resultado económico es una consecuencia de algo que está hecho con pasión.
¿Cómo se proyecta la empresa?
-Investigando cada vez más, con un proyecto más ambicioso, vinculándose con el mundo, tratando de ingresar con nuestros productos en otros países, con un programa de mejoramiento que es muy probable que lo ampliemos en los próximos años, tratando de encontrar a los mejores profesionales para que vengan a trabajar con nosotros en los lugares donde la familia no está en condiciones de ocuparlos. Pero nuestro objetivo es la excelencia.
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