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20-05-2008
NATALIA CAGGIANO: LUGAR DE RESIDENCIA LAS GRUTAS
Esta albertina que vive en Río Negro cuenta algunos detalles del lugar donde se estableció..

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Del otro lado del mundo, a miles de kilómetros, a cientos, hay albertinos residentes que abandonaron esta ciudad para buscar otros caminos. De eso se trata este espacio: de conocer las historias de aquellos que alguna vez se fueron de este paraje y añoran su tranquilidad, sus lugares y su gente. Natalia Caggiano reside en Las Grutas, en la costa de la provincia de Río Negro, hace casi tres años. “El lugar es hermoso, playas anchas, muy tranquilo. Es una ciudad chica, aproximadamente de seis mil habitantes estables, y un número importante de gente que tiene casas de fin de semana o para alquilar y aparece de vez en cuando por acá, sobretodo los fines de semana. Como toda la Patagonia es bien chata y árida, hay mucho silencio, de noche lo único que se escucha es el ruido del mar y yo tengo la suerte de vivir a dos cuadras”.

- ¿Cómo es la gente del lugar?

- Las personas que he tenido la suerte de conocer son maravillosas, pero como en todos lados hay para todos los gustos. Acá viven mucho del turismo y del mar, es uno de los lugares donde se sacan más mariscos en la costa atlántica.

- ¿A qué se dedica?

- Doy clases de pilates con reformers, y estoy haciendo los trámites para entrar a trabajar en salud pública.

-¿Qué diferencia encuentra con Alberti?

- No encontré grandes diferencias con Alberti, más allá de las geográficas. Lo que podría ser una gran diferencia es que acá esta todo por hacer, es una ciudad que va creciendo mucho año a año y por lo tanto las necesidades crecen también. Hay trabajo, hay mucha calidad de vida.

- ¿Cómo son los inviernos y cómo los veranos?

- Los inviernos son muy tranquilos, fríos, pero se aguanta. La gente está como encerrada, no se ve mucho movimiento, diría que después de las siete de la tarde no te encontras a nadie en la calle pero eso tiene su encanto también. Es hermoso caminar por la playa al solcito, se ve durante la tarde gente, familias con chicos en la playa, las plazas, está bueno. Y los veranos todo lo contrario, pasamos de ser 6.000 a 50000 en una noche, miras la playa desde arriba del acantilado y solo se ven sombrillas de colores. Habilitan un montón de comercios que durante el invierno no están abiertos y hay un montón de espectáculos al aire libre, como el cine en la playa, donde todos nos llevamos una reposera o lona y miramos películas. la mayor parte de las veces nacionales mientras cenamos al aire libre y con el mar a tres metros.

- ¿Es un lugar de paso o es el lugar que eligió para vivir?

- Acá encontré mi lugar, no es fácil estar lejos de los afectos, la familia, amigos.......pero gracias a Dios eso lo vamos construyendo de a poco también acá. Aparte que es un lugar donde hay muchas posibilidades laborales y de crecimiento.

- ¿Tiene vida social en ese lugar?

- Te diría que tengo más vida social que en Alberti, las reuniones entre amigos son infaltables acá, todo es motivo para un asadito y he conocido gente maravillosa con la que nos acompañamos y ayudamos continuamente.

- ¿Cuántas veces por año vuelve a Alberti?

- A Alberti no vuelvo tanto como quisiera por las distancias, los horarios de los colectivos que no hay nada directo, me tengo que manejar con Buenos Aires o La Plata y es un trastorno. Y además el no disponer de tiempo como para viajar más seguido.

Natalia hizo una elección de vida. Se estableció en Las Grutas, a doscientos kilómetros de Puerto Madryn, ese hoy es el lugar de residencia.
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