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| 29-06-2012 |
| NO HAY DISTANCIA |
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La legislación vigente en la provincia de Buenos Aires no establece una distancia entre la zona urbana y la de fumigación terrestre. Así lo explicó Director de Fiscalización Vegetal. |
En la sede de Productores Rurales estuvo el Director de de Fiscalización Vegetal del Ministerio de Asuntos Agrarios, Luis Herrera. El funcionario habló sobre la ley vigente en la provincia de Buenos Aires que si bien expone algunas regulaciones no puntualiza en la distancia que debe haber entre la zona urbana y la fumigable. “La ley que fue sancionada en 1988 y reglamentada con su decreto en 1991, fue hecha en un momento donde el tema productivo era totalmente diferente a lo que es hoy. El cambio ha sido muy drástico. Desde la maquinaria, la tecnología, la informática, todo se modificó. Los sistemas productivos y las áreas de siembra, son cuestiones que también han cambiado. Y en forma paralela el crecimiento poblacional hace que las ciudades se vayan extendiendo, lógicamente que pueden llegar a generar conflictos en lugares donde antiguamente se producía. Es una ley que necesita agiornamiento, hay cuestiones que nos las contempló en su momento porque no eran necesarias”.
¿Qué dice de las aplicaciones?
-Que las áreas tienen una exclusión de dos kilómetros de los centros poblados, y la aplicación terrestre no está delimitada. Sí, puntualiza en que tiene que haber una receta agronómica confeccionada de puño y letra por un profesional.
¿El Ministerio contempla la posibilidad de una ley que surja de la provincia de Buenos Aires o de los Municipios?
-Desde el ámbito provincial tiene que haber un paraguas porque cada provincia tiene su ley que regula el uso de agroquímicos, porque tiene que establecer pautas. No obstante los Municipios tienen la potestad por la ley orgánica de las Municipalidades de normar todas las cuestiones que creen necesarias para salvaguardar la salubridad de la población. En ese sentido nosotros creemos que los Municipios son actores estratégicos porque la provincia de Buenos Aires es muy grande y muy compleja en su diversidad productiva, nadie va a saber más de las cuestiones locales, en ese sentido es donde deben actuar y trabajar de manera coordinada.
¿Hay un actor clave en esta tarea que es quien realiza las aplicaciones ya que de él depende la salud de la gente?
-Si bien hay que realizar las aplicaciones para el sistema productivo actual, son necesarias, es inviable pensar una producción sin agroquímicos. Pero sí se pueden tomar muchas medidas y generar un uso racional de los agroquímicos. Desde la compra hasta la aplicación. Necesitamos que los productores y los aplicadores se capaciten y sean conscientes porque lo prioritario para nosotros, más allá de que se necesita producir, es la salud de la gente. Tratando de hacer todo lo posible, todo lo que está a nuestro alcance. El principal responsable de que surja un problema en una aplicación es el productor o el aplicador que la hizo incorrecta, que no respetó el sentido del viento, la humedad relativa, la temperatura, utilizó productos que son más nocivos que otros, hay muchas medidas que se pueden tomar para preservar la salud de la población.
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