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| 10-07-2012 |
| RECOMENDACIONES CONTRA LA DISCRIMINACIÓN |
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El INADI (Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo) ha elaborado un Informe denominado “Buenas Prácticas en La Comunicación Pública - Discriminación por aspecto físico”
En dicho Informe se señala que las sociedades contemporáneas otorgan centralidad al aspecto físico y a las problemáticas vinculadas con lo corporal. Agregan que en la vida moderna asistimos a un culto al cuerpo; y que ese lugar central de la apariencia y de la mirada hace que el cuerpo sea enjuiciado, sometido a un permanente proceso correctivo, enaltecido o sancionado según se ajuste o no a los parámetros establecidos de la normalidad y a los ideales estéticos impuestos. En este marco socio-cultural de las sociedades modernas, la discriminación por motivos de aspecto y caracteres físicos es parte de la vida cotidiana.
Indican que el modelo estético impuesto en esta época, en nuestra sociedad, se asocia, entre otros caracteres o atributos corporales, a la delgadez y la altura (al aspecto general estilizado), la juventud o –en la adultez– el aspecto joven/sin envejecimiento visible y el color de piel claro.
Con tal fin, recomiendan a los comunicadores públicos (periodistas, docentes, politicos, dirigentes sociales y empresarial, etc) lo siguiente:
- Evitar asociaciones entre belleza y éxito/ felicidad/vida ideal.
- No asociar lo bello con lo bueno, lo correcto, o lo mejor.
- Evitar el enaltecimiento de determinados atributos físicos,
- Comunicar otros valores (alcanzables) por encima de la belleza, con especial énfasis al dirigirse a niños y adolescentes.
- No aludir al cuerpo como algo a modelar, corregir, normalizar.
- No recurrir a la burla o ridiculización en función de determinados caracteres físicos ni a la asociación de alguno de los mismos con anormalidad.
- Generar discursos alternativos que valoren la diversidad en términos estéticos y colaboren a flexibilizar parámetros.
- Apoyar y difundir las iniciativas y campañas vinculadas con la difusión y valoración de nuevos parámetros estéticos.
- No aludir a atributos físicos de una persona cuando no viene al caso ni hace a lo central de una noticia o información.
- No reducir a la persona a sus caracteres físicos y menos aún de manera despectiva (“el gordo/a”, “el enano/a”, “el rengo/a”, “el viejo/a”, etc.). En cualquier caso, se trata solamente de un atributo físico que no define ni expresa lo que una persona es.
- Sensibilizar en torno al sufrimiento y los riesgos para la salud que conlleva la vigencia y legitimación de estos parámetros.
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