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26-08-2012
SU VIDA EN SAN MARTIN DE LOS ANDES
Cansada de la gran ciudad, eligió un destino para mejorar su vida. Se enamoró del lugar, consiguió trabajo y está radicada en el sur del país.

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Por ahora su vida está en Vita Nuova... Betina Mauro, nacida y criada en Alberti, donde pasó su infancia y adolescencia. Esa etapa de su vida que describe como “increíble e inolvidable”. Tras concluir sus estudios en la Escuela de Educación Media Nº 2, eligió una carrera y un rumbo. “En el año 2002, a los 18 años, emprendí mi huída a Capital Federal para estudiar la carrera que hoy, por suerte, es mi fuente de trabajo: Educación Física. La concluí en el año 2005”.


¿Fue fácil adaptarse a la capital y dejar la casa paterna?


-Esos cuatro años de estudios me ayudaron a crecer mucho como persona, a formar un poco más mi carácter y aprender que ya no tenía a nadie que resolviera los problemas. Aprendí que en la capital era una más, y no la conocida "brujita", como lo era en Alberti, pero como todo bicho de pueblo, la ciudad me empezó a pesar, y bastante.


¿Cuál fue la solución?


-Corría el año 2008 cuando un deseo intenso de cambiar mi vida empezó a surgir, el stress del trabajo, corriendo de un lado para el otro para poder hacer una diferencia se me hacía cuesta arriba, la multitud, la locura, la violencia y la inseguridad no era lo que quería para mi vida y así, una mañana le comente a mi amiga Nadia (con la cual vivía): "me voy a ir a vivir al sur, no sé a donde pero en un mes me voy de acá". Y así fue, me puse a San Martín de los Andes como primer objetivo, mi lema era: me quedo por allá, o tomo unas largas vacaciones y cuando vuelvo arranco de nuevo.


¿Lograste llegar a destino?


-Sí, San Martín me enamoró a primera vista y acá me quedé, al principio fue duro, llegué un 8 de abril del 2008, con una mochila y un bolsito, sin conocer el lugar, ni a nadie y con una lluvia torrencial que empezó el 10 de abril y paró a mediados de julio, sin dar tregua. Todos creían que estaba loca y que no iba a aguantar ni dos meses, pero para sorpresa de amigos y familiares, ya hace cuatro años y meses que resido en esta hermosa ciudad.


¿Cual fue tu primer trabajo?


-En un kiosco, en el que conocí a una colega, y hablando de todo un poco, me comentó que iba a poner un gimnasio y me preguntó si me gustaría trabajar con ella, lo que acepté de inmediato. Hacía un mes que estaba en el pueblo y ya había conseguido trabajo en lo mío, y allí estuve dos años, luego en enero del 2010 comencé el curso de Guardavidas que finalicé en el 2011.


¿Qué es Vita Nuova?


-Es el lugar donde trabajo desde que obtuve el título de Guardavidas y es una de las piletas que hay en el pueblo.


¿Cómo es tu vida allí?


-Además de trabajo, éste pueblo me dio una vida tranquila, de naturaleza pura, montaña, mountain bike, nieve, esquí, camping y un montón de amigos que son como de la familia, esa familia que dejé en Alberti para lograr cumplir mis sueños. No sé si será éste mi último destino, pero por ahora mi vida está en San Martín de los Andes.
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