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| 01-09-2012 |
| UNA RESOLUCION DE LA CAMARA DE APELACIONES |
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La Justicia dispuso la libertad del acusado de tenencia de estupefacientes para comercialización. Esa imputación fue producto de un allanamiento de la Policía de Alberti. |
A través de los medios de comunicación de Bragado se conoció la noticia de la liberación de Pablo Montenegro, quien hacía tres meses se encontraba detenido acusado del delito de tenencia de estupefacientes para la comercialización. Según consigna la prensa de esa ciudad la Justicia cambió la carátula de la causa atribuyéndole al acusado que la tenencia de la picadura y las plantas eran para consumo personal.
Montenegro había sido imputado de tenencia de estupefacientes para comercialización y tenencia de arma de guerra, pero según confirmó su abogado defensor, Rafael Acuña, no se pudo probar que comercializara la droga.
Montenegro es consumidor y así lo admitió ante la Justicia, pero negó que la vendiera. En cuanto a la cantidad encontrada, se había hablado de 18 kilogramos, pero acreditaron 2 kilogramos de picadura de marihuana. La defensa dijo que las plantas descubiertas en una investigación de la policía de Alberti eran sembradas para consumo personal.
Esta causa se inició a raíz de una investigación por tráfico de estupefacientes llevada a cabo por la Policía Comunal de Alberti, el 17 de mayo un gran número de policías irrumpieron en dos domicilios de la ciudad de Bragado logrando secuestrar gran cantidad de marihuana y la detención de dos personas.
El operativo estuvo a cargo del comisario inspector Raúl Ferrari y de los subcomisarios de la Policía Comunal de Alberti, participó el personal de la comisaría local, efectivos del Grupo Apoyo Departamental y se sumaron policías de Bragado.
Una de las viviendas allanadas está ubicada en la calle Los Paraísos, entre Los Ombúes y Los Cedros, en el complejo habitacional plan Federal de Las Violetas, en ese lugar secuestraron una importante plantación de marihuana y también material en proceso de disecado. Además se encontró una suma elevada de dinero en efectivo y un revólver calibre 38 largo, de acuerdo a lo que informó en su momento la Policía.
La vivienda es propiedad de Pablo Montenegro quien vivía junto su concubina, una militante local de “La Campora” y empleada del Consejo Escolar, que tras los sucedido presento su renuncia al cargo.
En un reciente fallo la Cámara de Apelaciones de Mercedes modificó la carátula del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización por el que se acusaba a Pablo Montenegro, y ordenó su liberación a través del Juzgado de Garantías del doctor Lisciotto.
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