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| 11-09-2012 |
| IMPOSICION DEL NOMBRE |
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Fue designada la Escuela Nº 1 con el nombre de Adriana Villa. La Escuela recibió una bandera de ceremonias y se hizo el acto oficial del Día del Maestro. |
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En la Escuela Nº 1 hubo tres actos en uno. Todo comenzó con el reemplazo de la bandera de ceremonias del establecimiento educativo. Como la que tenía la Escuela llevaba escrito el nombre de Julio Argentino Roca al designarla con el de Adriana Villa era imperioso reemplazar la enseña patria. Fue donación del diputado provincial Leonel Zacca que les entregó a las autoridades del establecimiento la nueva enseña que fue bendecida por el cura párroco Ernesto Palermo.
“Cuando recibí el pedido de la enseña patria para el cambio de nombre de esta querida Escuela Nº 1, comprendí al momento que no era uno más, sino que era especial, un pedido que me enorgullecía, nada más ni nada menos que algo inédito, un cambio de nombre para colocarle el de Adriana Villa. De alguien que hizo de la docencia y de la amistad un culto. Los que tuvimos la posibilidad de pertenecer a su generación supimos de su dedicación por la educación más allá de las aulas…Por eso creo que nos es casualidad que hoy estemos colocándole el nombre de Adriana Villa a esta Escuela, cuando esto surgió de una recomendación de la dirección de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, entre algunas personas ilustres para nuestro pueblo”, dijo el diputado Leonel Zacca.
A continuación, los familiares, las autoridades educativas y los directivos de la Escuela descubrieron en el frente el nombre de Adriana Villa, con el que se renombró el establecimiento educativo.
Tras descubrir el nombre el padre Ernesto Palermo hizo la bendición, y después habló la directora de la Escuela Nº 1 Gladys Mignaco. “Hoy estamos reunidos aquí para darles la culminación a una serie de acciones que comenzaron en el año 2011, previstas para el cambio de nombre de esta institución. Ya que la dirección General de Cultura y Educación al celebrarse el bicentenario de la patria y los veinticinco años de la democracia, consideró una oportunidad emblemática para cambiar los nombres de los establecimientos con el propósito de sensibilizar a las nuevas generaciones. Para reflexionar sobre nuestra democracia, nuestros derechos humanos y nuestra soberanía mediante la revisión de los nombres dados a los establecimientos educativos”.
Como la postulación del nombre de Adriana Villa fue impulsada por un grupo de personas que además elevó las fundamentaciones, los directivos de la Escuela les solicitaron que en el acto alguien exprese el sentir de esa elección. Así lo hizo Cecilia Irurtía: “Muchos de los que fuimos sus alumnos no lo dudamos, quien más que nuestra querida Adriana merecía tal honor… Presentamos un proyecto con los fundamentos que hoy queremos compartir con ustedes para que no queden dudas de por qué esta excelente y recordada maestra merece ocupar el lugar que durante tantos años distinguió el controvertido Julio Argentino Roca…Qué mejor para una Escuela centenaria como la Nº 1 que llevar el nombre de una maestra que dejaba el alma en el aula”.
La intendente Marta Médici le entregó a las autoridades un retrato con la imagen de Adriana Villa para que lo coloquen en la galería del establecimiento, acto que cumplieron también aquellos que impulsaron la designación. Luego la intendente dijo: “Adriana se fue muy joven y en esa corta vida dejó una huella como hija, como madre, como esposa, como docente, como escritora y poetisa. Pero permítanme poner por encima de todo ello su fe inquebrantable y su lucha titánica ante la adversidad, dándonos a todos nosotros el ejemplo de su valentía y su dignidad”.
Las banderas de ceremonias de los establecimientos educativos ingresaron al acto que continuó con una suelta de globos y la palabra de la Carmen Villa, la hermana de Adriana. “En nombre mío y de toda mi familia quiero agradecer por este acto tan emotivo, se nos mezclan las sensaciones y las emociones, no porque no se lo merezca, pero parece tan grande el hecho de cambiar el nombre a una Escuela”.
Luego comenzó la última parte del acto con la palabra de una docente hablando de Sarmiento, la representación de dos manifestaciones artísticas y para el final se pronunció la jefa Distrital de Inspectores Mónica Píccolo. “En este acto doblemente significativo, hoy conmemoramos a Sarmiento como el gran maestro argentino y también recordamos a una gran docente albertina dando lugar a la designación de la Escuela. En homenaje a ellos dos saludamos a todos los docentes de este distrito”.
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