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30-10-2012 |
¿MENOS CARNIVOROS? |
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Si bien el consumo de carne vacuna bajó notablemente en éstos años, mucho de ese consumo fue reemplazado por otro tipo de carnes. |
El consumo de carne vacuna hace años que cae en picada y hay quienes ubican esa merma en un 20% para el último período interanual. Dicen que los cortes de vaca fueron reemplazados por carnes alternativas, entre las que parece reinar el cerdo.
En este sentido, se supo que el consumo de carne vacuna, el plato principal de la dieta de los argentinos, registró el nivel más bajo de los últimos 53 años al disminuir en cerca de 50% entre 1958 y 2011.
Lo cierto es que el mismo informe consigna que el consumo promedio ha resultado de 53,4 kilos por persona en 2011, contra 98,4 kilos en 1958, cuando comenzaron a elaborarse las estadísticas de ingesta de carne a través del IPCV.
Los especialistas señalan que uno de los motivos de las últimas bajas fue que la rentabilidad no era importante; por lo que los productores dejaron la actividad y se pasaron a la soja, que es mucho más rentable. También el aumento en el precio al consumidor de alrededor de 180% desde 2009 fue uno de los factores fundamentales para la baja en la ingesta.
Sin embargo, no es que la gente coma menos carne, sino que el volumen de consumo continúa siendo el mismo, con la diferencia de que se invirtieron los lugares entre los cortes. Ahora se consume más cerdo y pollo que en décadas anteriores.
Sin embargo, más allá del gusto de los consumidores argentinos, las tendencias a largo plazo en los mercados mundiales demuestran que el consumo de carne vacuna y sus sustitutas, seguirán creciendo a causa de la incorporación de millones de habitantes de China e India al consumo mundial.
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