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| 14-08-2013 |
| EL PASO A NIVEL CON ANTECEDENTES |
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Todos los accidentes que se han registrado en los últimos años con el tren se produjeron en el paso a nivel de las calles Riobamba y Azcuénaga. |
El paso a nivel de las calles Riobamba y Azcuénaga es el que tiene la estadística de más accidentes que involucran a formaciones ferroviarias. Los registros de los últimos años marcan que en ese cruce se han repetido los encontronazos entre trenes y vehículos.
Si bien dos de los pasos a niveles más importantes de la ciudad tienen barreras, hay otros que no las tienen y uno de ellos es el que cruza las calles Riobamba y Azcuénaga. El dato estadístico que se desprende de la realidad refleja la importancia que hay que darle a ese lugar cuando se cruza con un vehículo.
Ese paso a nivel está distante unos 300 metros de la estación Vaccarezza, ese escaso recorrido que tiene el tren hace que al llegar al cruce la velocidad sea menor, cuando sale como cuando llega a su parada. Esta es una de las causas por las que los accidentes no tienen consecuencias fatales. No sucede lo mismo con los trenes de carga cuya la velocidad no se reduce tanto porque no se detienen en la estación.
Hay que mencionar como antecedente que el último sábado la formación 116 del servicio de pasajeros embistió, minutos después de las 8, a un automóvil que cruzaba el paso a nivel en sentido Riobamba – Azcuénaga. En el auto iban dos personas que resultaron ilesas, lo mismo sucedió con los conductores del tren y los pasajeros.
El 14 de abril de 2010, pasadas las 08:20, se produjo otro accidente ferroviario ese paso a nivel de las calles Riobamba y Azcuénaga. El tren de pasajeros que había partido de la estación Vaccarezza embistió a un tractor de la Municipalidad que cruzaba de Riobamba a Azcuénaga. Después del choque el vehículo fue arrastrado por la formación unos metros hasta que el maquinista Román Carlocchia, pudo detener el tren. El impacto separó la cabina del compartimiento del motor del tractor y el carro que llevaban tuvo importantes daños producto del arrastre. Las dos personas que iban en el tractor sufrieron golpes y no tuvieron lesiones de gravedad, quedaron conmocionados por el accidente.
La madrugada del 17 de agosto de 2009, alrededor 02:50, el tren de pasajeros que había partido de la estación Once pasadas las 23 embistió a una camioneta marca Volkswagen Saveiro que cruzaba de Azcuénaga a Riobamba. Después del choque el vehículo fue arrastrado por la formación 115 unos 60 metros hasta que el maquinista Felix Chelia, oriundo de la ciudad de Bragado, pudo detener el tren. El impacto se produjo a la altura de la puerta del conductor y al quedar calzado el frente de la locomotora en el habitáculo no arrolló la camioneta, la arrastró por las vías. El conductor de la camioneta sufrió lesiones menores producto del impacto.
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